Baldosas Hidráulicas
Los suelos hidráulicos vuelven a ser tendencia en los hogares. Se trata de baldosas decorativas, o también llamadas mosaicos hidráulicos. En sus inicios se fabricaban de manera artesanal realizando los grabados que al unirlos se creaban mosaicos. Este tipo de suelo era muy utilizado durante el modernismo, al principio del siglo XX.
Es un tipo de baldosa compuesta principalmente de cemento, pigmento y marmolina que se consolida mediante su prensado en una prensa hidráulica, de ahí su nombre. En su proceso de fabricación no es necesario el uso de hornos, lo que hizo de este material un uso bastante extendido como alternativa a otras opciones como el mármol o la madera. Uno de sus puntos fuertes es la gran variedad de diseños y colores.
Actualmente su proceso de fabricación a día de hoy sigue siendo artesanal, realizando cada baldosa a mano mediante el uso de trepas o moldes y de la prensa por un experto artesano. Aunque también podemos encontrar baldosas hidráulicas echas a través de procesos industriales.
Este tipo de suelo es muy habitual encontrárnoslo en estancias tales como la cocina o el baño, ya que cuenta con una alta calidad, muy resistente y antideslizante. Perfecto para interior como exterior.
Un ejemplo importante podemos verlo en el paseo de Gracia de Barcelona con las baldosas hidráulicas que decoran su suelo y que fueron diseñadas por Gaudí. Otro día dedicaremos un espacio para hablar de los edificios representativos donde podemos ver ejemplos bellísimos de baldosas hidráulicas artesanales.
Si bien es cierto, este tipo de baldosas nos ofrecen una versatilidad en cuanto diseños, colores o formas. Podemos encontrar mosaicos arabescos, florales, geométricos, clásicos, rústicos, etc. Normalmente suelen ser de 20 x 20 cm, pero también podemos encontrar baldosas más grande. También nos brindan una gran durabilidad, ya que tienen una alta resistencia al paso de los años, los factores atmosféricos como la humedad o el simple uso.